Hace cien años que Josep Albertí, junto a su mujer, Mercè Bosch, abrieron una modesta carnicería en Campllong. La carne fresca y los embutidos que elaboraban fueron muy bien aceptados por toda la zona y rápidamente consiguieron una reputación de producto de calidad y muy fresco.
Historia
El jamón cocido, como el curado, tienen un lenguaje propio. Y lo que nos dice entre las líneas de sus betas blancas es fundamental para conocer la calidad del jamón. Hay cuatro reglas que, con un mínimo de práctica, permiten conocer el jamón elaborado de manera tradicional. Haz la prueba con cualquier jamón cocido de La Selva y descubre las diferencias que hacen que el jamón cocido La Selva sea un producto excepcional.
El buen jamón
En La Selva elaboramos el jamón según el proceso tradicional. Seleccionamos rigurosamente la materia prima e inyectamos manualmente, pieza a pieza, la salmuera, el agua saturada en sal que es el conservante natural. Mantenemos el hueso dentro de la pieza durante el largo proceso de maduración, aportando al jamón un sabor y textura únicos.
En La Selva elaboramos nuestro Jamón Cocido, Pechuga de Pavo, Muslo de Pavo y Pechuga de Pollo sin ningún tipo de alérgenos de obligada declaración
